Valle de Aneu: Lagos de Gerber

Distancia: 11 km

Desnivel positivo: 634 m

Tiempo: 2h50

Dificultad: fácil

Esta es posiblemente una de las rutas de senderismo lacustre de mayor belleza de toda la zona. Realizada en el mes de julio.

Tomamos la carretera C-28 que discurre entre Vielha y Esterri d'Aneu. A un par de kilómetros del Puerto de la Bonaigua, pasado el restaurante Cap del Port y una vez iniciada la bajada que serpentea hacia la Vall d'Aneu, ya perteneciente a Pallars Sobira, se encuentran dos zonas de estacionamiento para dejar el vehículo.

El camino a tomar arranca junto una construcción ganadera pegada al riachuelo de La Bonaigua, en diagonal ascendente hacia el Valle de Gerber. El sendero es estrecho y con bastantes raíces pero poca pendiente.

En un par de kilómetros alcanzamos el primer lago, Estanyola de Gerber, parada predilecta para familias con niños debido a su proximidad, fácil acceso y zonas sombreadas. Seguimos subiendo por el fondo del Barranc de Gerber, por un camino estrecho de tierra y rocas que discurre junto a un arroyo, flanqueado por un sinfín de plantas arbustivas y flores de montaña. A lo largo de toda la ruta nos saldrán al paso varios lagos pequeños que carecen de nombre pero les sobra belleza.

Lago sin nombre

Al llegar a la zona más septentrional del Lago de Gerber, el sendero serpentea de forma ascendente durante unos buenos metros hasta alcanzar el punto dominante del lago a unos 200 metros a nuestros pies y lugar de parada obligada por la panorámica. En verano, el agua adquiere unas tonalidades turquesa impactantes.

Una vez rebasado el Lago de Gerber, la ruta se vuelve más rocosa pero sin llegar a presentar grandes dificultades. Nada que unos bastones o una mano amiga no puedan sobrellevar. Dejamos una pequeña cascada que cae desde una pared de 20 metros a nuestra izquierda y que nos refresca y alegra la vista a partes iguales.

Cascada vertical

Tras cruzar un canchal bastante extenso, la senda prosigue ya más tendida y menos arbolada durante un par de kilómetros hasta llegar al Lago Redondo -Estany Redó- y un poco más adelante alcanzar nuestra meta, el Refugio Mataró (2.460m). Se trata de un refugio metálico cuyo color naranja destaca contra las paredes de roca circundantes de la zona periférica del Parque Nacional de Aigüestortes y Lago San Mauricio. Cuenta con 16 literas y una emisora de emergencia y forma parte de la rede de refugios de la zona. A sus pies, dos lagos, Estany Long y Estany Negre de Dalt, satisfacen el hambre de montaña y naturaleza del más pintado.

Emprendemos el regreso desviándonos del camino para hacer una parada técnica en una pradera sin pendiente junto a uno de esos lagos sin nombre entre Estany Redó y Estany de Gerber. El terreno, surcado de riachuelos y arroyos en los que comienzan a dar sus primeros saltos las crías de trucha que podrán pescarse dentro de unos meses, uno puede tener la suerte puede encontrarse algún nevero en el que dejar enfriando unas bebidas, el tiempo meter los pies en el lago para disfrutar de una rehidratación fresquita y regresar al punto de partida en el parking de la carretera.

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