Han transcurrido casi dos años desde mi escapada de 48 horas al abrigo de las montañas. Aquí os dejo un intensivo fotográfico del recorrido que hice por la Península del Cabo.
DE CAMINO A LA RESERVA NATURAL DE LA PENÍNSULA DEL CABO
SIMON’S TOWN
Esta población, la última con un mínimo de servicios decente —supermercado, farmacia, restaurantes y tiendas en general— antes de encaminarme hacia la Reserva Natural de la Península del Cabo, es mundialmente conocida por albergar la requete fotografiada Boulders Beach, en la que habita una inmensa colonia de pingüinos africanos. Pero normalmente huyo de los lugares turísticos así que ¡nada de fotos de pingüinos!
RESERVA NATURAL DE LA PENÍNSULA DEL CABO, COSTA ESTE
FARMER’S CLIFF TRAIL
Primera parada ya dentro de la Reserva Natural de la Península del Cabo. Este sendero teóricamente me llevaría hasta una piscina natural —Venus Pool— por un estrecho sendero de 8 kilómetros ida y vuelta, pero el recorrido que me he propuesto por la reserva natural no me permite invertir mucho tiempo en cada lugar, así que camino un par de kilómetros desde el parking de tierra del mirador de Smitswinkel Bay hasta un acantilado y regreso al coche.
BUFFEL’S BAY
Pese al buen estado de la carretera que me lleva hasta aquí. Pese a la piscina natural que llama a un chapuzón —a prueba de tiburones— y a pesar de las barbacoas de obra que invitan al picnic y al esparcimiento, nadie se ha cruzado en mi camino aún. Esta soledad salvaje me entusiasma, aunque algunas fuentes consultadas recomiendan cautela en determinados lugares aislados como la playa de Noordhoek, más al noroeste.
RESERVA NATURAL DE LA PENÍNSULA DEL CABO, COSTA OESTE
DE CAMINO AL CABO DE BUENA ESPERANZA
El supuesto punto más austral del continente africano — se disputa ese puesto con el Cabo de Agujas, también en Sudáfrica— cambió de nombre bajo el reinado de Juan II del Reino de Portugal, al considerar que Cabo de Buena Esperanza resultaba más alentador y reflejaba el sentir general al haber descubierto una nueva ruta hacia la India. Lugar de culto para todo viajero que se precie, la instantánea en el Cabo se queda en tareas pendientes al ver la cantidad de autobuses aparcados junto a la carretera.
THOMAS T. TUCKER SCHIPWRECK TRAIL
La historia del Thomas T. Tucker es digna de un guión de película, pero la resumiré contando que fue uno de los 2500 buques Liberty construidos durante la II Guerra Mundial para ayudar a los países aliados. En 1942, este navío encalló en esta zona de la costa africana, huyendo de los submarinos de las Potencias Eje que pululaban por la zona.
OLIFANTSBOS
El interior de Olifantsbos está cuajado de Fynbos, formaciones vegetales típicas de la Península del Cabo compuestas por gran variedad de plantas. Los incendios que periódicamente asolan esta región favorecen la reproducción de la flora autóctona ya que por un lado, el humo junto con el viento ayuda a la germinación de las semillas y por el otro, el fuego acaba con las plantas antiguas o muertas. Puede que el reciente incendio y la brutal sequía que padeció la zona en los primeros meses de 2018 fuesen el motivo por el que avisté tan pocos bichos: dos babuinos, una avestruz, una tortuga y tres lejanos bontebok.
VUELTA A LA CIVILIZACIÓN
Abandono la reserva natural con el sabor agridulce de haberme encontrado con un tesoro mayor del que esperaba. Mágico, inesperado e inolvidable. Me marcho con ganas de más.